Estamos en una época en la que los jeques árabes y presidentes multimillonarios están de moda en el fútbol y en la que el dinero reina por encima de cualquier conocimiento futbolístico. Mientras algunos equipos como PSG, Manchester City o Chelsea disfrutan de fichajes lujosos sin aparentes consecuencias, otros clubes como el Málaga y el Racing de Santander están sufriendo las secuelas que han dejado irresponsables jeques en su equipo gastándose más dinero del que disponían y llevando posteriormente a la ruina a estas instituciones.
El año pasado, los aficionados del Málaga encaraban la temporada con gran ilusión. Un jeque árabe llamado Al-Thani llegaba a la Costa del Sol con sus petrodólares dispuesto a gastárselos en constituir un Málaga de Champions. Fichajes de categoría como el de Cazorla, Monreal, Toulalan o Van Nistelrooy daban esperanza a una afición ya cansada de deambular por la mitad de tabla hacia abajo. Aunque, a decir verdad, el verdadero fichaje estrella de la temporada sería el ex-valencianista Isco Alarcón. El Málaga terminó la temporada en puestos de Champions League. La afición malacitana se las prometía muy felices, al tiempo que idolatraban a su jeque Al-Thani. Pero seguro lo que muchos no se imaginaban es lo que iba a suceder este verano. Las denuncias por impagos de Villarreal, Osasuna o River Plate en los traspasos y las de los trabajadores y jugadores en sus salarios han dejado a la entidad blanquiazul en una situación crítica.
Vender jugadores era la única solución para sanear las arcas, y a partir de ese momento empezaron a salir rumores sobre posibles salidas de los jugadores más cotizados. Los primeros en emigrar han sido Cazorla y Rondón. Isco tenía muchas novias, Real Madrid, Chelsea, Barcelona, Arsenal y Manchester United se habían interesado en él. Pero el de Benálmadena ya lo ha dejado claro a través de Twitter: "Aunque no me paguen, mi sitio está aquí", además añadió: "Ahora más que nunca, orgulloso del Málaga". La afición seguirá disfrutando de su ídolo en La Rosaleda, mientras que él les devolverá el apoyo recibido desplegando la calidad y la magia que atesora. Muy grande Isco, ójala lo podamos ver en la Champions League demostrando lo que realmente vale vistiendo la camiseta del equipo de su ciudad.
El año pasado, los aficionados del Málaga encaraban la temporada con gran ilusión. Un jeque árabe llamado Al-Thani llegaba a la Costa del Sol con sus petrodólares dispuesto a gastárselos en constituir un Málaga de Champions. Fichajes de categoría como el de Cazorla, Monreal, Toulalan o Van Nistelrooy daban esperanza a una afición ya cansada de deambular por la mitad de tabla hacia abajo. Aunque, a decir verdad, el verdadero fichaje estrella de la temporada sería el ex-valencianista Isco Alarcón. El Málaga terminó la temporada en puestos de Champions League. La afición malacitana se las prometía muy felices, al tiempo que idolatraban a su jeque Al-Thani. Pero seguro lo que muchos no se imaginaban es lo que iba a suceder este verano. Las denuncias por impagos de Villarreal, Osasuna o River Plate en los traspasos y las de los trabajadores y jugadores en sus salarios han dejado a la entidad blanquiazul en una situación crítica.
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